ANTIGUA ENTRADA A LA ZANJA ENCEMENTADA DE LA HUERTA DE LA BARRAGANA
Hace mas de 5 décadas un grupo de pequeños mozalbetes nos dirigíamos a la huerta de la barragana para recolectar parotas secas para ir a venderlas con Don Manuel Fuentes "El Burro" del barrio del piojo.
Algunos pueden pensar que los recuerdos forman parte únicamente de la nostalgia. Otros, en cambio, que gracias a ellos, nuestro pasado, somos lo que somos hoy día.
En ese tiempo nos juntábamos "los compas" del barrio, a decir; Fortino González "chaquetas", J. Guadalupe y Ramón Andrade Ramos, Sergio Santana Ramos, los hermanos Watussis, Benjamín, José, Moisés, Sergio, Diego Covarrubias Ramos, Rigoberto, Eduardo y Nicolás Chávez Aguirre y muchos mas que se escapan a mi mente, quienes gustosos recorríamos las huertas buscando la sombra de esos grandes colosos que nos proporcionaban las parotas secas para meter al costal y llevárselas a la bascula para que nos las tasaran y pagaran lo correspondiente.
A continuación les comparto estas imágenes sobre la entrada a la huerta de la barragana en el espacio de donde estaba la zanja encementada donde de pequeños nos bañábamos cuando terminábamos de recoger las parotas; otras veces lo hacíamos por el simple hecho de mitigar la calor del medio día en el pueblo.
Recuerdo que muchas veces nos íbamos temprano al jardín y no faltaba alguna ocasión que nos ensuciamos y nos trasladamos hasta esta zanja encementada para volver a bañarnos o limpiarnos y ahí mismo nos secábamos con el viento y nos volvíamos a cambiar para regresar al jardín.
Esta entrada se usaba para ir a bañar al río o a la zanja encementada; que muchas veces una u otra estaba ocupada por familias enteras y pues nos íbamos al río o nos quedábamos en la zanja.
En el devenir del tiempo este espacio fue adquirido por un Ingeniero de apellido "Acuña", que fuera propietario de una Universidad Privada en Colima y privatizo el acceso o servidumbre pública en la cual las familias del pueblo teníamos para ir a disfrutar de este remanso y frescas aguas del río de la barragana.
Sabemos que estas huertas están protegidas por un decreto presidencial al ser consideradas uno de los pulmones de nuestro pueblo y forman parte de la pequeña mesopotamia Comalteca, pero al cambiar de propietarios, los nuevos adquirientes, que en su mayoría son extranjeros de nuestro pueblo, cerraron el paso y les valió un cacahuate la anterior "servidumbre pública" ante la complacencia de quienes ostentaban el poder público.
Quizás haya sido, porque los nuevos propietarios poseían influencias políticas y eran de los mismos del partido político imperante, o quizás haya sido por intereses políticos; porque no obstante que existe un comité ciudadano de protección de las huertas y llenan de reclamos en las reuniones, hasta el momento no ha existido poder humano que haga valer el paso de la servidumbre publica.
Los recuerdos son cosas muy diferentes para unos que para otros. Algunos los toman como un vivir en el pasado, un simple y eterno retroceso basado en la nostalgia. Otros, en cambio, los usan de punto de partida para vivir el presente de una manera diferente. Sea cual sea tu postura, nunca está de más reflexionar
Por la forma de como nos desempeñabamos en ese tiempo; con todas las privaciones, y niveles de pobreza, podemos decir que "eramos felices; porque vivimos de todo, dando lucha como hermanos a las adversidades.
Todos los grandes momentos fueron y son parte importante de los recuerdos de nuestra gran amistad y que perdura en el tiempo, no obstante las actividades a que nos dediquemos cada uno de nosotros.
Porque ciertos recuerdos son como amigos comunes, porque vivimos con todos los que nos rodean y esos recuerdos siguen latentes en cada uno de nosotros.
Aquí un gran muro infranqueable para impedir el paso o servidumbre pública hacia la gran zanja y los frescos chapoteaderos que albergaran a las familias comaltecas en el "Río Tía Barragana". Porque al hacer el cambio de uso de suelo y cambio de propietario, simple y sencillamente cambiaron la reglas y ahora son otras formas de impedir el acceso; porque simple y sencillamente dejo de ser servidumbre pública según los nuevos propietarios para convertirse en propiedad privada.
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