LA ESCUELA DE ARTESANÍAS COMALA SURGIÓ COMO UNA NECESIDAD DE TENER UNA ARTESANÍA PROPIA DE COLIMA Y DE ENSEÑAR A LOS JÓVENES PARA QUE TUVIERAN MEJORES INGRESOS.
Este es el primer esbozo histórico sobre la escuela de artesanías comala; al final de esta entrevista seguiremos con otras fuentes.
En días pasados tuvimos la oportunidad de platicar con varios amigos socios artesanos de la actual sociedad cooperativa de artesanos pueblo blanco, antes denominada “Escuela de Artesanías Comala” y nos confiaron algunos datos interesantes, que dicho sea de paso y por autorización de los mismos, con gusto se los comparto.
Me entreviste en primer lugar con J. Guadalupe Rosas Flores, quien actualmente funge como presidente de la cooperativa y me comentó, que
según le platico el Sr. Alejandro Rangel Hidalgo, fundador de esta escuela de artes en Comala., que ésta inició por la calle Madero, (llamado taller madero), en Colima; donde Don Alejandro tenía sus talleres artesanales y por sus relaciones hizo amistad con el presidente de la república; en ese entonces Luis Echeverría Álvarez y ahí nació la inquietud por hacer esa escuela taller de artes en Comala.
Agrego Lupe Rosas, que también les dijo, cuándo ellos eran aprendices directos de Don Alejandro, que primeramente se había pensado formar esa escuela en Tuxpan, Jalisco; y finalmente se logró que se construyera en Comala y así fue como el CAPFCE construyó estas instalaciones allá por los años de 1968 o 1969, con el fin de que fuera una escuela taller de artes y bajo la tutela de Don Alejandro Rangel Hidalgo.
Añadió Lupe, que Don Alejandro tenía buenas intenciones, porque decía que, en aquel entonces el trabajo del campo, era mal pagado y es lo que prevalecía y pues si aprendían los jóvenes un oficio artístico, podían mejorar su calidad de vida con mejores ingresos; así como también que Colima, tuviera con su propia artesanía, que lo distinguiera y fueran distintas a las de Jalisco, Michoacán, México y demás estados.
El objetivo es que se identificará con las del resto del mundo. Esa era la meta general de esta escuela de artes, por eso era bastante exigente con sus aprendices y les buscaba aptitudes para encuadrarlos en los distintos talleres artísticos que tenía. Si alguno no destacaba en un área., lo mandaba a otra y a otra; si finalmente no tenía talento entonces se le despedía, para que le dejara el lugar a otra persona que si tuviera interés en artes y oficios.
Posteriormente allá por los años 1970, inicia sus actividades como escuela de artesanías, en el área de pintura, estuvo como maestro Emilio Pinto Escobar, En herrería Juan Anguiano, Talabartería José Rodríguez, padre de Paramón (+) y Chon Rodriguez, Carpintería Manuel Rico, y Enrique García, en acabados Manuel Ramírez, en dorado, Rodolfo Pinto., esos eran los maestros delos aprendices de primera generación., en mantenimiento estuvieron Don Alfonso González Amezcua, José Ponciano Jiménez Orozco y como velador Ezequiel Torres
En primera generación en pintura estuvieron Gustavo Silva José Haro Carbajal, José Silva, José Zúñiga, Pedro Muñoz, Arturo Pinto, Víctor Pinto, Héctor Galindo, Guadalupe Rosas Flores, J. Jesús Figueroa (Tecomán). El tiempo que se les daba de enseñanza era de 3 meses de 8 horas diarias metidos en los talleres, aunque muchos duraban más horas, para hacer los ejercicios de los diseños de pinturas artísticas de Don Alejandro Rangel Hidalgo, de ahí la distinción del arte rangeliano.
Todo ese tiempo era para puro aprender y hasta que Don Alejandro calificaba cada diseño y entonces ya te empezaba a dar trabajos a prueba por la calidad en el arte de los aprendices y él mismo los calificaba y si le convencían, entonces ya te daba la confianza para reproducir sus obras de arte cuidando todos los detalles y no podíamos salirnos del diseño maestro.
Lupe Rosas recuerda que actualmente hay artesanos en Comala que iniciaron de aprendices en un taller específico de sus instalaciones y como seguramente
Don Alejandro no les encontraba aptitudes en el mismo y los rolaba a otras áreas de los mismos talleres., para que probaran suerte en otras áreas; por eso, muchos amigos entraron a pintura, después, los rolaron a carpintería, a dorado, a terminados y hay algunos artesanos que entraron en uno y salieron siendo buenos en otra cosa del mismo arte rangeliano.
En los talleres de carpintería iniciaron de aprendices de los maestros carpinteros Manuel Rico y Enrique García, se trajeron de colima a Julián (Yulius) Contreras Verján, y de aquí de comala estaba Benjamín Trujillo, (el potrillo), Isabel Cristobal y de ahí ellos empezaron a enseñar a otros y de ahí se vinieron otras generaciones donde vimos a Enrique Aguirre, Salvador Camberos Venegas, Gamaliel Verduzco Zamora, Chava Contreras, J. Jesús (Kalimán) y Salomé Montelón Córdova ellos fueron de generaciones posteriores. Continuará
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